Javier Ferrer Ortiz, Catedrático de Derecho Canónico y Derecho Eclesiástico de la Facultad de Derecho de la Universidad de Zaragoza, de donde ha sido Decano desde junio de 1997 hasta junio de 2000, señaló en un curso celebrado en Torreciudad que “hay un exceso de licenciados en Derecho y ya no puede afirmarse que la existencia del título garantice la inserción en el mercado laboral. De hecho, algunas Facultades de Derecho han experimentado este mismo año un significativo descenso en el número de alumnos, que no puede atribuirse exclusivamente a razones demográficas”.
Académico correspondiente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, autor de diversos libros y publicaciones, afirma que “durante los últimos treinta años se han multiplicado las Universidades en España. Este fenómeno lo han experimentado de forma particularmente intensa las Facultades de Derecho que han pasado de algo menos de veinte a casi sesenta”. Este Doctor en Derecho y en Derecho Canónico señala que “la Facultad de Derecho de la UZ está considerada como una de las clásicas en España y en el resto de Europa”, y se refiere entre otros objetivos al deseo de potenciar la Escuela de Práctica Jurídica. El profesor Ferrer dijo también que “el nuevo Plan de estudios va a reforzar lo que ya viene siendo una realidad durante los últimos años: la posibilidad de cursar un año en otra Universidad europea, a través del Programa Sócrates-Erasmus. Ni que decir tiene la importancia que estas acciones están llamadas a cumplir, a medida que la integración europea se va haciendo mayor”.
“En este mismo sentido- añadió-, la Facultad trabaja en un ambicioso proyecto para ofrecer una doble titulación conjunta en Derecho, con una Universidad francesa y la propia Universidad de Zaragoza”. Otro de los objetivos deriva del deseo de responder a las necesidades del mercado, en la línea de preparar, con la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, una doble titulación en Derecho y Administración y Dirección de Empresas. Según Ferrer, “el Rectorado ha asumido como propia esta iniciativa y se trabaja para empezar el curso próximo”. “En síntesis –explica-, lo que se pretende es ofrecer la posibilidad de obtener ambas licenciaturas en un plan integrado entre las dos Facultades y con un duración estimada de seis años. Si se tiene en cuenta que los estudios de Derecho están organizados en cinco curso y los de Administración y Dirección de Empresas en cuatro cursos, ya se comprende que el objetivo es del máximo interés”.