Skip to content Skip to footer

Arequipa, Perú

Con motivo de la 10ª Peregrinación con la Virgen de la Puerta, advocación patrona del norte de Perú, el 29 de mayo de 2011 un grupo de peruanos quiso sumarse al encuentro con una fotografía de la Patrona de Arequipa. El 28 de agosto de 2013 una familia peruana ofreció al santuario una talla que sustituyó a aquella fotografía.

 

INFORMACIÓN SOBRE ESTA ADVOCACIÓN

La devoción a la Virgen de Chapi, patrona de la región Arequipa, se remonta al siglo XVII, cuando fue traída al Perú por misioneros franciscanos. Desde entonces, y tras una serie de sucesos considerados milagrosos, esta advocación de la virgen María es venerada por un creciente número de fieles procedentes de todas partes del país que le rinden un gran homenaje cada 1 de mayo.

Respecto a la palabra “Chapi”, los entendidos indican que proviene de las expresiones en quechua “Chaypi, Chaypi”, “Chajchay llallápi” y “Chaj llallápi”, que significan “Aquí nomás”, “Aquí, aquí”, “Hasta aquí”. Cuenta la tradición que la imagen, bautizada con el nombre de “Nuestra Señora de la Purificación del Valle de Chapi”, pero popularmente conocida como “Virgen de Chapi” o “Mamita de Chapi”, fue encontrada en un cerro cercano al complejo arqueológico Churajón y tras el terremoto de 1743 se decidió trasladarla hacia el antiguo valle de Chapi, donde se levantó una iglesia en su honor. Debido a los desmanes ocurridos durante su festividad en 1793, el párroco de entonces dispuso el traslado de la imagen a la localidad de Sogay. Después de avanzar un buen trecho, los cargadores de la imagen se detuvieron a descansar para recuperar fuerzas. Entonces, se produjeron ráfagas de viento cada vez más intensas hasta convertirse en una tempestad cargada de tierra.

Una vez que cesó la tormenta y cuando los cargadores se disponían a continuar la marcha, notaron que la imagen estaba tenía más peso y pese a los esfuerzos que hicieron por levantarla, sentían que las fuerzas flaqueaban. Este hecho fue interpretado como la voluntad de la Virgen de permanecer en Chapi
En 1868 ocurrió otro terremoto. La imagen quedó intacta a pesar de que la parroquia se destruyó. En 1921 y pese a que el altar fue consumido por las llamas, la imagen no sufrió daño alguno. Se decidió construir su Santuario, lo primero que hicieron fue el Museo del Niño.

Es la imagen que lleva la Virgen en su brazo izquierdo. Según cuenta la tradición, los ojos del Niño Cimarrón se muestran a veces vivaces o apagados porque reflejan alegría o tristeza, mientras que sus mejillas se muestran pálidas y luego se sonrojan. Son muchos los fieles quienes han percibido estos cambios. Esta imagen del niño Jesús también ha aparecido en fotos con lágrimas en los ojos, y los peregrinos y lugareños cuentan que el Niño Cimarrón suele hacer travesuras dado que en sus escarpines aparecen abrojos, pajitas o los encuentran sucios y cubiertos de polvo porque, según dicen, sale a jugar con los hijos de los mineros y a pasear por los cerros aledaños al santuario.