La «Celebración de la Pasión del Señor» en esta tarde del Viernes Santo, tal y como denomina la liturgia de la Iglesia a los oficios del día de hoy, ha reunido a numerosos fieles que han llenado el templo de Torreciudad. A los asistentes que ya estuvieron en la celebración de ayer se han añadido familias originarias de comunidades autónomas en las que el Jueves Santo es día laborable. Al concluir la ceremonia, el clima ha permitido rezar el Via crucis por los soportales de la explanada, siguiendo los textos del libro del mismo título escrito por san Josemaría Escrivá. Al acabar la meditación de las catorce estaciones, se ha procedido a la adoración de la cruz, realizada durante los oficios de forma representativa por un número reducido de fieles para no alargar excesivamente la duración de la celebración.