El día 2 de mayo de 1998, con motivo de la celebración de la Jornada Mariana de la Juventud, un grupo de estudiantes de la Universidad de Navarra depositó esta copia de la imagen que se venera en la ermita del campus universitario.
INFORMACIÓN SOBRE ESTA ADVOCACIÓN
En un lugar elevado del campus de Pamplona, junto a uno de los senderos del Camino de Santiago, hay una pequeña ermita llena de encanto en la que se venera imagen de la Virgen María, Madre del Amor Hermoso, regalo de san Josemaría. Cuando a partir de 1960 se fueron levantando los primeros edificios del campus de la Universidad en Pamplona, san Josemaría quiso que una de las construcciones, modesta pero de singular significación, fuese una ermita en la que se venerara una imagen de Nuestra Señora, que sería regalo suyo, para que presidiera la vida que bulle en el campus universitario.
En el verano de 1963, san Josemaría anunció personalmente ese proyecto: «Hace muchos años hice el propósito de enviar una imagen de la Virgen, que estará a poca altura, no al alcance de la mano, pero sí al de las miradas. La imagen será de tamaño natural y el Niño estará apoyado sobre libros; al pie pondremos: Sancta Maria Mater Pulchrae Dilectionis, y me dará mucha alegría que todos tengan cariño y piedad a esta imagen». La talla se encargó a Pasquale Sciancalèpore, un artista romano, que años más tarde esculpió la imagen del Cristo vivo en la Cruz, de la Capilla de Torreciudad.
El escultor cinceló la imagen, de una altura aproximada de 1,70 m, en mármol blanco estatuario, pulimentado y patinado. Es una imagen preciosa, como Madre y Reina, llena de majestad y dulzura. La Virgen está sentada: un velo le recoge los cabellos y desciende sobre sus hombros. El manto, con orla dorada, cae en pliegues sobre la túnica. El Niño, de pie sobre un rimero de libros, sujeto de la cintura por el brazo de su Madre, bendice con una mano y sostiene una rosa dorada con la otra. En los lomos de los libros aparecen los títulos de las dos facultades iniciales, Derecho Civil y Medicina, y el de la primera eclesiástica, Ius canonicum. Se terminó de esculpir avanzado 1964.