Mons. Ángel Pérez Pueyo, obispo de Barbastro-Monzón, ha presidido hoy una misa con ocasión del 50 aniversario del dies natalis (día del nacimiento al Cielo, es decir, el día de su fallecimiento, en expresión de la Iglesia) de san Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei, nacido en la ciudad del Vero en 1902.
Durante su homilía, mons. Pérez afirmó que «uno de los insignes santos y fundadores de Barbastro, universalmente reconocido como ‘el santo de lo ordinario’, nos invita a descubrir cómo lo santo puede terminar en lo pequeño, y cómo lo extraordinario puede brotar del quehacer cotidiano». En otro momento, el obispo indicó que «fue en Barbastro, su tierra del alma, donde se forjó su llamada universal a la santidad. (…) Y la presencia de Dios en lo cotidiano fue el corazón de su revolución espiritual. Cada cristiano, desde su vocación concreta, está llamado a la santidad».
«Que la intercesión de san Josemaría —concluyó— nos anime a vivir con alegría, con profundidad y con coherencia nuestra vida ordinaria, porque es ahí, en lo pequeño, en lo ordinario, en lo aparentemente insignificante, donde Dios nos espera y donde se juega tu santidad, mi santidad».