Me llamo Xiaoyan, y a partir de mañana me llamaré María Mia Xiaoyan porque voy a bautizarme en Zaragoza, en la Iglesia Católica. Nací en Nanchong, Sichuan (China). Vine a España en febrero de 2019 para aprender español y hacer un máster en ingeniería informática. Durante mi estancia aquí, en un viaje compartido con BlaBlaCar, conocí a Ana María, que me trató con mucho afecto, me ayudó en la elección de universidad para realizar el máster y me explicó la religión católica. Cuando en septiembre de 2020 regresé a China para trabajar, seguí en contacto con ella por internet, y con amigas suyas de Hong-Kong, también del Opus Dei, que me cuidaron mucho. Yo quería ser como ellas, con mucha paz y mucho amor a Dios. Pensaba que si Dios me había puesto estas personas católicas en el camino, era porque quería que fuera católica, y entonces me decidí a dar el paso. Y me empezaron a dar catequesis en chino.
Este año he venido a bautizarme coincidiendo con el centenario de la ordenación sacerdotal de san Josemaría, lo haré mañana y también me confirmaré y haré la Primera Comunión. Y antes de recibir los sacramentos, en la víspera de mi bautismo, he querido venir hoy a presentarme a la Virgen de Torreciudad, a poner bajo su protección mi vida y a pedirle que sea una buena católica.
De hecho, he elegido el nombre de María para mi vida cristiana como muestra de mi amor a la Madre de Dios. Ante su imagen le he pedido mucho por mi familia, por mis amigos y especialmente por mis amigas del Opus Dei de Hong-Kong y de España, y también por mi país. Me ha impresionado mucho el vídeo-mapping sobre el retablo de la pasión, muerte y resurrección del Señor. Y me he puesto muy contenta al ver a tantas familias alegres, padres e hijos, que venían a rezar a la Virgen. Doy muchas gracias a Dios por todo lo que estoy viviendo estos días.