El rector de Torreciudad anima a los matrimonios asistentes al encuentro defender el derecho a la vida de los no nacidos. La ofrenda de hijos a la Virgen de Torreciudad ha protagonizado la Jornada Mariana por la Vida celebrada el pasado día 27 de marzo en el santuario, bajo el lema ‘Proclamar y celebrar la Vida’, con motivo del Día Mundial de la Vida del pasado jueves, festividad de la Encarnación del Señor.
El encuentro se ha dirigido de manera especial a las familias de todos los niños nacidos en los últimos años, personas a favor de la vida no nacida y matrimonios jóvenes que esperan o desean tener un hijo. Durante el día, han tenido especial presencia un centenar de alumnas de dos centros educativos, uno de Tarragona y otro de Madrid, acompañadas por sus madres. Entre los asistentes, también hay que destacar al matrimonio ecuatoriano afincado en Madrid que ofrecían al tercero de sus hijo, y que fue salvado de un aborto hace pocos meses.
Durante la eucarística y presentación de los niños a la Virgen, en la que los padres han subido hasta el altar mayor con los hijos, el rector de Torreciudad les ha recordado su “deber de defender los derechos de los hijos y el primero de ellos su derecho a poder nacer”.
El rector del santuario también animó a combatir los modelos sociales y culturales en contra de la maternidad. “Deseo rendir un homenaje a todas las madres que se dedican al cuidado de la familia y que afrontan numerosos sacrificios para dar lo mejor que tienen a sus hijos”. “Los padres que se apoyan desde la fe encuentran en el amor de Cristo y de sus madre María la fuerza necesaria para crear una cultura de la vida”.
Antes de finalizar, Javier Mora-Figueroa recordó el centenario de la primera peregrinación a pie de la familia Escrivá de Balaguer hasta la antigua ermita de Torreciudad, en agradecimiento a la Virgen por la curación de San Josemaría cuando tenía en torno los dos años de edad. “El nuevo santuario existe porque hace un siglo una madre tuvo la generosidad de ofrecer su hijo moribundo a Nuestra Señora de los Ángeles de Torreciudad y hoy ese hijo está en los altares”.
A los matrimonios que han ofrecido sus hijos se les ha hecho entrega de un certificado y una medalla de la Virgen de Torreciudad en conmemoración de la presentación del infante. Por la tarde, el encuentro ha concluido con el acto litúrgico de la Bendición solemne, momento en el que se ha rezado el Rosario por la paz y a favor de la vida.