A María le diagnosticaron un cáncer en 2019 y le dieron escasas posibilidades de supervivencia. Junto a José, su marido, acudió a Torreciudad para pedir ayuda a la Virgen. Dos años después, acompañada de sus dos hijas y de su esposo, ha vuelto para dar gracias a Nuestra Señora por su recuperación.