Skip to content Skip to footer

Una niña entre sus brazos
presentaban en el templo.
Una niña llamada María
la que sería Madre de Dios.
Y tú me preguntas a mí:
¿de quién eres ?
!Yo soy de María¡
¡La Madre más bonita!
¡Mírame Madre Mía¡
¡Mírame que hoy vengo a felicitarte!
Me hago pequeña como tu
para decirte muy bajito:
¡Te quiero tanto mi Virgencina!
Me he colgado de tu cuello
para besar mil veces, tu rostro tan bello.
Jesús me ha cedido su sitio
este pequeño ratito…
Ya me voy Madre para no acapararte
pero nunca te olvides:
¡Siempre seré tu hija!
¡Yo soy de María!