Skip to content Skip to footer

Querida Madre:
Hoy me he emocionado cuando una amiga me ha mandado unas fotos desde allí, donde ha ido a visitarte y es que te echo tanto de menos que sinceramente, he sentido envidia sana pero le he dejado el encargo de que te diera de mi parte, un besote enorme.
Madre…los problemas aumentan por momentos y yo quisiera que me concedieras por favor la oportunidad de hacer mío el sufrimiento ajeno para aliviar así sus cargas, sus dolores, sus penas…Libéralos a ellos y dámelo a mí y por todos ellos, lo ofreceré porque lo están pasando muy mal.
Es tu mes…es tiempo de pedirte con cariño pero recuerda Madre, que estos nudos que tan apretainos tenemos, si tu quieres los puedes desatar pero si quieres que sigan enredados hasta que lo veas oportuno, no me negaré pero entonces quiero hacerlos míos..
María, miráme… míranos a todos con compasión porque somos todos todos tuyos.
Te quieroooooooo y deseo ir a verte cuando pueda, si fuera en Mayo, sería un gran regalo para las dos.