Madre: Anoche me llegó la noticia de los destrozos que le provocaron al Sagrado Corazón de Jesús de la Roda de Andalucía.
Estamos en este mes de Junio dedicado a Consolar su Corazón Herido, a amarle como realmente se merece porque esto es lo único que nos pide. Y nosotros podemos darle tanto….Nuca llegaremos a darle como Él se nos da pero Él espera de nosotros un poquito de nuestro amor.
Anoche nos pedía a gritos que veláramos con Él, que no le dejáramos solos…
Perdona Madre a esos desalmados que mutilaron y decapitaron a tu Hijo sin compasión, con burla y resentimiento.
De nuevo, un nuevo Calvario…
Se repite la historia como en el Cerro de los Ángeles. Sigue entregando su vida por cada uno de nosotros, sigue sufriendo por nuestros pecados. Pero si hay algo que me impacta en lo más hondo de mi alma es que siempre queda intacto Su Corazón Ardiente. Ese Corazón que sigue palpitando porque es Amor Misericordioso. Ese Corazón en el que estamos todos tatuados a fuego en su interior.
Madre, podrán quitarle las manos y arrancarle su rostro en mil pedazos pero nadie, NADIE, puede arrebatarle el amor más grande que nos tiene. A pesar de todos nuestros desprecios, odios e insultos, Él sigue amándonos hasta el extremo desde «otro Gólgota».
Y yo me arrimo a Ti, Madre Mía para que me enseñes a curar sus Heridas y sepa ser consuelo en estos momentos tan duros. Quiero aprender de Ti para besar Su Corazón, para ser sus manos que ahora no tiene, para ser sus ojos y sus labios y poder gritar al mundo que Dios tiene Corazón de Hombre, que el Amor nos amó primero. Dame la fuerza que Tu tienes para perdonar a los que me hieren y para pedir perdón a aquellos que hiero yo.
¡Madre, en Ti Confío!
P.D: Ayúdame con esta tarea tan bonita y especial. Permanecer en su Amor.
