La residencia Lindeboom, de Bejaanderzog (Bélgica), visitó el año pasado Torreciudad y dejó como recuerdo una imagen de la Virgen de Flandes. Este año ha vuelto, recorriendo la Ruta Mariana, y la réplica de Onze-Lieve-Vrouw van Vlaanderen ha presidido de nuevo la misa a la que han asisitido.