Durante el último fin de semana de abril, bajo el lema «La solidaridad ante la crisis» y organizadas por Cooperación Social y el Patronato de Torreciudad, se celebraron en Torreciudad las X Jornadas del Voluntariado con la presencia en el acto de clausura de Nuria Chinchilla, profesora del IESE y Directora del Centro Internacional de Trabajo y Familia. Más de 100 participantes escucharon a esta especialista en conciliación laboral, familiar y personal, que subrayó la importancia de los valores morales a la hora de afrontar los problemas derivados de la crisis. «Hay mucho en juego como para que la actual situación propicie recortes en los proyectos de solidaridad y desanime a los voluntarios en la labor que realizan», destacó Chinchilla.
En la conferencia inaugural, Eva Holgado, Presidenta de la Federación Española de Familias Numerosas, subrayó que la familia es la mejor escuela de solidaridad, y abogó para que «se reconozca que los hijos son un activo fundamental para cualquier sociedad». Insistió en que ser madre de familia proporciona «innumerables alegrías», y pidió a las instituciones públicas mayor implicación en la ayuda a los padres jóvenes, «una de las mejores inversiones», afirmó. La primera Mesa Redonda estuvo centrada en las necesidades de primer orden, y fue moderada por Ana Cavero, periodista de Aragón Televisión. Se expusieron las iniciativas de éxito llevadas a cabo por el Banco de Alimentos de Barcelona, Caritas de Reus, la Asociación Adaia de Lérida y Manos Unidas de Barbastro. La coherencia entre la actividad solidaria y las convicciones personales fue uno de los aspectos en los que más insistieron los ponentes.
En la segunda Mesa Redonda desempeñó el papel de moderador el Director Adjunto del Diario del Altoaragón, Javier García Antón. En ella se abordó la relación entre la solidaridad y los voluntarios. Intervinieron representantes de ONGs de Murcia («Voluntarios sin Fronteras»), Madrid (Federación del Voluntariado de la Comunidad de Madrid) y Burgos (Foro Español de la Familia), que desde perspectivas distintas subrayaron la importancia de la motivación, la formación y los planteamientos positivos en la relación de las ONGs con sus voluntarios. Los propios voluntarios también pudieron ser protagonistas, y ofrecieron un variado abanico de testimonios solidarios en el 2º Día del Voluntario.
Colaboradores de ONGs de Sevilla, Murcia, Madrid, Lérida y Burgos compartieron con los asistentes diversas historias de vida recogidas de su propia experiencia personal. Los relatos coincidieron en subrayar que hay que confiar en el ser humano, y que es necesario sensibilizar a las jóvenes generaciones para que conozcan directamente las graves necesidades que experimentan las personas más desprotegidas.
Por otro lado, cerca de 300 personas de origen rumano participaron en la 3ª Jornada de Familias de Rumanía celebrada el domingo 26 de abril en Torreciudad. Acudieron grupos familiares y algunas comunidades con su propio sacerdote, procedentes de Barcelona, Reus, Calahorra, Lérida, Zaragoza, Madrid, San Sebastián y diversos pueblos de los alrededores. En los actos litúrgicos mostraron la vistosidad de sus iconos marianos y entonaron durante la procesión cantos tradicionales de su tierra dedicados a la Virgen.