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Mons. Elizalde atendió amablemente nuestra petición de contestar a varias preguntas relacionadas con su participación en la Jornada Mariana de la Familia en Torreciudad. Estas son sus respuestas:

1. ¿Qué pedirá a la Virgen María para las familias en este comienzo de curso?

Que les haga confiar más en el Señor y en el proyecto que el Señor tiene para cada familia en cada uno de sus miembros. Que sepan descubrir los acentos y prioridades del proyecto familiar en este principio de curso. Que sepan organizar una estrategia familiar para ese proyecto.

2. ¿Qué pueden aportar las familias cristianas a los más vulnerables?

Lo primero es saber que efectivamente muchísimas familias en nuestro entorno están necesitadas. Tomar conciencia de ello es el primer paso para una ayuda efectiva. Además de la solidaridad y la generosa ayuda a quien no tiene, la familia cristiana debe contagiar también la esperanza y la fuerza que adquieren en la vida de Fe. Comunicar esa alegría de saberse amado por el Señor, acompañado por Santa María, es todo un estímulo para seguir adelante. Los vulnerables son el rostro de Cristo en nuestras calles y colegios. No podemos mirar a otro lado ante situaciones de vulnerabilidad y de necesidad. En el Evangelio encontramos muchísimas invitaciones del Señor a ayudar al que nos necesita y ése es su núcleo. Así que una familia se juega su identidad cristiana en la ayuda a las personas más vulnerables.

3. ¿Qué debe caracterizar una peregrinación, qué debe reunir para que tenga muchos frutos espirituales?

Tres elementos:

a) un camino: del lugar ordinario y la vida cotidiana, al santuario. Ponerse en camino implica ganas, expectativas, deseos de cambio, salir de la comodidad y aventurarse.

b) un encuentro: Con el Señor en el sacramento de la penitencia, la eucaristía y la oración. Con los hermanos en la convivencia con los amigos, con otras familias y con la misma familia de una manera diferente.

c) un futuro: propósitos, metas, recursos y estrategias para mejorar.

4. Torreciudad aspira a ser conocido como el santuario de las familias, como protagonistas de la nueva evangelización, y como un lugar en el que las personas se encuentren con Dios, de un modo especial a través de los sacramentos de la reconciliación y la eucaristía. ¿Qué importancia tienen los sacramentos para intentar vivir una vida cristiana transformadora?

Crecemos al ritmo de los sacramentos y la familia también. La familia necesita de raíces y tierra vital para crecer. Y eso es el santuario de la Virgen en Torreciudad. El sacramento de la Reconciliación recupera el proyecto original del matrimonio y de la familia. Lo libera de estorbos, frenos y lastres. La Eucaristía fortalece, alimenta e impulsa ese proyecto con una fuerza extraordinaria y desproporcionada. El Señor va llevando a plenitud a cada familia, fundamentalmente, a través de los sacramentos. Torreciudad tiene una misión providencial pues es el santuario mariano de la familia.