Unas quinientas personas asistieron en la noche del viernes a la inauguración del IX Ciclo Internacional de Órgano Música Sacra, que se celebra en el santuario de Torreciudad durante el mes de agosto. John Scott, titular de la catedral de Saint Paul de Londres, ofreció un recital basado en músicos ingleses y franceses, del XIX y del XX.
Scott, elegido Organista del Año por la Asociación de Organistas de América en 2002, ofreció un completo recital de una hora de duración, en la que sacó la máxima ganancia a cada uno de los 4.076 tubos que conforman el órgano del santuario. La obertura del Oratorio de ‘San Pablo’ de Mendelssohn, el Preludio y Fuga en Sol mayor de Bach y el concierto en Fa de Häendel le sirvieron para ganarse al aforo que lo despidió con un largo aplauso.
Al final del concierto, Scott se refirió al órgano del santuario subrayando la brillantez de su sonido, donde la única dificultad está en que “hay que tener mucho cuidado, porque las teclas son muy blandas y es facilísimo cometer errores”. Para este intérprete, “la música de órgano es una herencia musical que debemos preservar ante la excesiva concentración formativa de los jóvenes en áreas como las ciencias y las letras”.
Entre el público asistente, Luis Miguel Rabal, alcalde de Secastilla y diputado provincial, destacó “el apoyo de las instituciones hacia estos festivales, por la difusión para nuestras localidades con una diversidad de conciertos, que son una oferta complementaria para los visitantes”.
Éxito de la técnica
Soledad Mendive, organizadora del Ciclo, se mostró muy satisfecha por el comienzo de esta edición ya incluida en los Festivales de Aragón. Mendive afirmó que “ha sido una interpretación técnicamente impecable, a pesar de la novedad que para Scott supuso este teclado”.
María Eugenia Garcés destacó “la sonoridad”, en una demostración muy técnica, que “me ha encantado e impresionado”. Su marido Francisco Linares calificó a Scott de “virtuoso del órgano, que nos ha hecho disfrutar con una técnica muy depurada”.
La oscense Chusa Castán piensa que ha sido “increíble”, porque “es una música que te lleva a Dios, tanto por Bach como por el ambiente del santuario”. La organista donostiarra Maite Aranzabal señala que estamos ante “un libro abierto para aprender”, “y quiero destacar la registración francesa de la última obra, de L. Vierne”, así como “el calor que pone en la interpretación”, “el uso del pedal de expresión, el aprovechamiento de todos los registros”.
Por su parte, el crítico de cine Jerónimo José Martín opina que Scott ha interpretado tanto música clásica como moderna, asequible para un público medio. David Fuertes, que ha cursado Musicología en la Universidad de Valladolid, destaca que “ha conjugado diversos estilos musicales adaptados a órgano”. Creo que “el lenguaje contemporáneo que ha usado magistralmente Scott se adapta muy bien a la arquitectura moderna del santuario y a su entorno”.
El IX Ciclo continuará con la actuación de la americana Maria Nacy, profesora de órgano del Conservatorio Superior Municipal de Música de Barcelona y titular del órgano barroco de la Parroquia de Sant Bartomeu y Santa Tecla de Sitges. Nacy ofrecerá el próximo viernes 8 de agosto piezas del Miserere de Teixidó, interpretación que le valió el primer premio del Concurso Internacional de Composición para Órgano Cristóbal Halffter en 1999.