David y Marga son un matrimonio madrileño que, después de estar unos días esquiando en el Pirineo, en el viaje de regreso a Madrid han hecho una parada para saludar a Nuestra Señora de Torreciudad. También han aprovechado para presentar a la Virgen a sus hijos, Nicolás y Marcos, con la bendición de don José María García, sacerdote que atiende a los peregrinos en el santuario. Marga ha recordado con mucho cariño que su hermano Chema trabajó en Torreciudad, y también que la última vez que vino estuvo con su colegio, Orvalle. «Volveremos otro día con más tiempo, ¡seguro!», ha dicho David al despedirse.