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Andrés Ollero, catedrático de Filosofía del Derecho de la Universidad Juan Carlos I y diputado, dijo hoy en las III Jornadas del Voluntariado que “nuestro inminente horizonte multicultural reclamará la aportación de las diversas religiones a una imprescindible ética de la acogida” y recordó que la Constitución española excluye toda concepción laicista del Estado.

Unos ciento cincuenta voluntarios y colaboradores de ONG participan este fin de semana en El Grado en la tercera edición de las Jornadas del Voluntariado, que tratan sobre “El sentido religioso de la vida, acicate de solidaridad”, y organizadas por la ONG Cooperación Social y el Patronato de Torreciudad. Las sesiones fueron inauguradas por el alcalde de Barbastro y presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Antonio Cosculluela.

En opinión de Ollero, “España está llamada a experimentar por la creciente inmigración el mismo horizonte multicultural al que se abre ya toda Europa. Sólo una ética de la acogida, superadora del individualismo radical, podrá ayudar a abordar con sensatez y sin discriminaciones problemas sociales novedosos. La aportación cotidiana de las diversas confesiones religiosas en nuestro país permite considerarlas en este contexto como una relevante fuente de solidaridad, por más que la manipulación de anécdotas aisladas pueda permitir presentarlas como elemento conflictivo.»

Andrés Ollero recordó cómo «nuestra Constitución, excluyendo todo planteamiento confesional, considera a la religión como un valor público merecedor de colaboración estatal, lo que excluye todo planteamiento laicista del Estado. La respuesta obligada de las confesiones religiosas a esta colaboración estatal ha de ser un impulso a sus fieles para que, movidos por sus convicciones, contribuyan a fijar los mínimos éticos imprescindibles para garantizar una convivencia realmente humana».

Pilar Lara, presidenta de la Fundación Promoción Social de la Cultura, intervino sobre “La solidaridad en el beato Josemaría Escrivá”, y expuso la necesidad de dar “prioridad a la educación en los procesos de desarrollo. No es posible combatir a fondo la pobreza si las personas carecen de educación. Hay que invertir en formación: un hombre o una mujer que ha tenido acceso a la educación se hace más libre, más capaz de ser protagonista de su propio desarrollo”.

En su intervención, Antonio Cosculluela destacó “el interés en reunirse para valorar la importancia de valores como la comprensión mutua, la solidaridad y la colaboración, que nos ayuden a superar tantas situaciones de odio, egoísmo o prepotencia”. Se refirió a los voluntarios y ONGs como “ejemplo de generosidad social muy importante, y que es lo más cuando se apoya no en modas pasajeras, sino en convicciones profundas, que nos piden a cada uno una preocupación efectiva y afectiva por los demás”.

En las sesiones intervendrán también Juan José Toribio, director del IESE en Madrid y ex-director del Fondo Monetario Internacional, y monseñor Elías Yanes, arzobispo de Zaragoza.

La jornada de hoy se completa con una mesa redonda sobre “Convicciones y solidaridad” , con Riay Tatary Bakry, presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de España; Mariano Blázquez Burgo, secretario ejecutivo de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España; y Ángel García, fundador y presidente de «Mensajeros de la Paz».

La cena oficial de esta noche contará con la actuación de la Agrupación Folclórica Municipal Ciudad de Barbastro, y en la misa de mañana cantará la Coral Montisonense.