Albelda es una localidad de la provincia de Huesca con cerca de 900 habitantes, situada a 62 km. de Torreciudad. Su pequeña dimensión no ha sido obstáculo para la grandeza de ánimo de varios de sus vecinos, que hoy se han embarcado en una verdadera aventura de viaje en vehículos particulares hasta la frontera de Polonia con Ucrania. Un recorrido de 2.700 km. y 30 horas de duración tras el que recogerán a varias familias de refugiados que huyen de la guerra y a las que traerán de regreso al Alto Aragón el próximo martes. Cuentan para ello con la colaboración de varios ucranianos residentes en la comarca oscense de La Litera.
Fran es uno de estos vecinos, buen amigo de Torreciudad, que ha madurado la idea en poco tiempo y ha logrado la participación de otros nueve generosos albendenses y personas de Binéfar, como conductores de una pequeña caravana compuesta por cinco grandes furgonetas. Su objetivo es traer alrededor de 25 ucranianos refugiados de guerra y darles acogida, inicialmente en un albergue del cercano pueblo de Peralta de la Sal.
La respuesta de la población a su llamamiento para aportar ropa y productos de primera necesidad ha sido extraordinaria: las furgonetas irán completamente cargadas de mantas, abrigos, comida, medicinas, botiquines de primeros auxilios… Todo este material lo dejarán en la frontera para que pueda ser utilizado por las familias que se han visto obligadas a huir de su país y entran en Polonia.
Para que esta admirable iniciativa concluya muy bien, en el santuario vamos a ofrecer cada día el rezo del Santo Rosario por esta intención, pidiéndoselo a la Virgen de la Ternura, icono ucraniano que preside estos días el presbiterio del altar mayor. Fue traído el 12 de noviembre de 2016 por la comunidad ucraniana en Barcelona desde Zarwanytsya, el santuario mariano más importante de esta nación. Y hemos encendido diez velas para que Santa María proteja a los diez conductores a lo largo de todo el trayecto y vuelvan sanos y salvos con los hermanos ucranianos a los que van a facilitar la acogida en nuestra tierra.
